Las grandes discapacidades físicas conllevan con frecuencia síntomas secundarios que derivan en el empeoramiento del estado de salud, el bienestar y la calidad de vida. Para evitar o retrasar estas situaciones, Fundación Dfa desarrolla un programa encaminado a ofrecer a las personas con discapacidad un servicio que favorezca la capacidad funcional y la promoción de su autonomía.

A través de un conjunto organizado de actividades físicas, sociales, terapéuticas y formativas, se activan mecanismos de compensación con el fin de mejorar, mantener y maximizar la autonomía e independencia de las personas entre los 12 y 65 años con algún grado de dependencia. Un equipo multidisciplinar centra su esfuerzo en evitar el deterioro de los estados funcional e, indirectamente, social de las personas usuarias de este proyecto, quienes sitúan la nota media de este servicio en un 8,9 sobre diez. El dato se extrae de una serie de 34 encuestas realizadas a 18 hombres y 16 mujeres del programa.

Entre los aspectos que más destacan, igualan con un 9,1 de valoración aspectos como la atención, la amabilidad, la confianza y el ambiente que perciben. Esa misma calificación resulta del apoyo que suponen las diferentes actuaciones implementadas, ya que el 66.67% de las personas preguntadas eleva su nota sobre esta cuestión hasta el 10 y un 30,30% la sitúa al menos en notable.

El trabajo realizado por estudiantes del grado de Trabajo Social de la Universidad de Zaragoza revela que el 100% de las personas encuestadas recomendaría este servicio, aunque también cree en que existe un margen de mejora.

El proyecto en el que se enmarca el Programa de Autonomía Personal está financiado por el Gobierno de Aragón con cargo a la asignación tributaria del IRPF.