1 Julio, 2024

El intercambio entre residentes brinda una alternativa de convivencia y cultura

Residentes y voluntarios

Llegaron desde localidades situadas a poca distancia de Zaragoza, como Ejea de los Caballeros, pero también desde una de las ciudades más meridionales de la península (Almería). También procedían de Petrer (Alicante) y de Cáceres. Son siete hombres y mujeres que durante dos semanas del mes de junio se beneficiaron del programa de intercambio de residentes entre centros Cocemfe, una oportunidad para vivir una experiencia vacacional inclusiva y accesible en Zaragoza.

Las residencias Pomarón, Josemi Monserrate y Rey Fernando acogieron a estas siete personas foráneas, todas ellas con grandes discapacidades, mientras que siete residentes de estos tres centros de Fundación Dfa ocuparon las plazas vacantes dejadas en los lugares de origen.

Esta alternativa de convivencia y cultura permite viajar, experimentar sensaciones nuevas, realizar actividades diferentes y dotar de autonomía a las personas con discapacidad que por sus características tienen difícil acceso a grandes desplazamientos debido a su gran dependencia. «Con este intercambio, ven garantizadas la atención que precisan y unas pequeñas vacaciones que quizá de otra forma no podrían disfrutar», asegura Javier Velilla, educador social de la Residencia Pomarón.

«Con este intercambio, ven garantizadas la atención que precisan y unas pequeñas vacaciones que quizá de otra forma no podrían disfrutar»

En esta ocasión, los residentes llegados a la capital aragonesa disfrutaron de un atractivo programa de actividades dentro y fuera de los centros asistenciales. La Basílica del Pilar, el Acuario de Zaragoza o el Centro de Historias de Zaragoza, con una exposición Salvador Dalí y otra de Agatha Christie, fueron algunos de los lugares que visitaron. Además, como es habitual, las caras nuevas participaron en un calendario de actividades que se multiplicó como es costumbre en las residencias.

Esta combinación, con la accesibilidad y los recursos especiales para atender sus necesidades cubiertos, provoca que algunos de estos usuarios y usuarias repitan al año siguiente. «Son personas que se encuentran con bastantes dificultades para acceder a un ocio normalizado, participar en viajes o disfrutar de unas vacaciones, por eso este intercambio se convierte en una oportunidad», comenta Velilla.

El proyecto de Cocemfe Aragón pertenece al Programa de Interés Social financiado con cargo a la asignación tributaria del IRPF del Gobierno de Aragón.